La lucha contra el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) en Panamá no se detiene. Ahora el país se convierte así en el primero de Centroamérica y el Caribe en tener acceso a una innovadora terapia para el VIH, que combina dos moléculas en un solo comprimido (Darunavir y Cobicistat), denominado comercialmente Prezcobix, facilitando la adherencia al tratamiento y mejorando la calidad de vida de los pacientes.
La medicación combina dos moléculas, Darunavir caracterizada por su alta barrera genética y eficacia en diferentes escenarios y perfiles de pacientes, y Cobicistat, un nuevo potenciador que cuenta con una alta tolerancia.
Actualmente existen diferentes terapias para el manejo del VIH, cada una con distintos regímenes de tratamiento, según la forma en que combate el virus.
El medicamento estará disponible a partir de este mes de junio en la clínica principal de VIH del país, ubicada en el Hospital Santo Tomás, indicó el jefe nacional del programa de ITS/VIH/sida del Ministerio de Salud (Minsa), Carlos Chávez.
El funcionario explicó que el Prezcobix, es un medicamento que lo utilizan pacientes de la segunda línea de acción y que cuenta con el beneficio de que la persona portadora del virus pasará de tomar cuatro tabletas diarias, a una sola tableta diaria combinada con otra medicación.
“Hemos tenido algunos inconvenientes con personas que desarrollan resistencia y no tenemos tratamiento de otra línea que ofrecerles; pero con este medicamento, se va a mejorar la adherencia y va a mejorar los efectos adversos”, manifestó.
Chávez informó que se compraron aproximadamente mil frascos, lo que permite abordar en este primer año, más de 85 pacientes, pero han identificado alrededor 237 pacientes en todo el país, que se podrían beneficiar de esta línea de acción, porque son los más cercanos, a no tener otro esquema de tratamiento y requieren esta segunda línea de acción.
Según datos de 2022, se estima que hay 28,804 personas viviendo con VIH en Panamá; sin embargo, solo 23,950 conocen su estado serológico o que son portadoras del virus, y de esos, 19,001 están en tratamiento.
La prueba de VIH es clave en el manejo de esta epidemia, ya que permite a la persona conocer su estado y beneficiarse lo antes posible de un seguimiento y tratamiento médico, y, por otro lado, adoptar las medidas necesarias para evitar la transmisión del virus a otras personas.
Una prueba de VIH es el primer paso para combatir y controlar a tiempo el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida).
De hecho, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos indican que el tratamiento oportuno para el VIH puede hacer que la carga viral sea muy baja (supresión viral). Tener supresión viral significa tener menos de 200 copias de VIH por mililitro de sangre. Es decir, que puede reducir la carga viral a niveles tan bajos que las pruebas no la pueden detectar (carga viral indetectable).
Rezago en el diagnóstico del VIH
La lucha contra el VIH y el sida está muy lejos de terminar: los informes internacionales indican que hay un retraso global en la reducción de nuevas infecciones, lo que significa que se deben redoblar esfuerzos para lograr en los próximos ocho años el objetivo global de 2030 de poner fin al sida.
El panorama en Panamá no es diferente, pues se espera que la cifra de personas con VIH aumente debido al rezago en los diagnósticos que se originó en los primeros años de la covid-19, ya que todos los esfuerzos de la comunidad médica se centraron en atender la pandemia respiratoria.
Los datos del Programa Conjunto de Naciones Unidas sobre el VIH/sida (Onusida) de 2020 colocan a Panamá como el primer país de Centroamérica con mayor cantidad de nuevas infecciones de VIH, con un estimado de 1,800 casos, seguido muy de cerca por Costa Rica, con 1,700.
En el país, lo más preocupante es el aumento de nuevas infecciones en edades de 20 a 29 años y el alto porcentaje de personas que no conocen que son portadoras del virus.
Los reportes del Minsa muestran que el año pasado hubo 571 nuevas infecciones de VIH en el rango de edad de 20 a 29 años. De ese total, 276 casos corresponden a edades de 20 a 24 años y 295 casos, de 25 a 29 años.
Además, hay datos de las autoridades de salud que indican que alrededor de un 20% de las personas que vive con VIH no sabe que son portadora del virus, lo que a su vez impide que reciban tratamiento o tengan la posibilidad de una vida sana y productiva.
Las personas interesadas en acceder a tratamiento de VIH o en un diagnóstico oportuno pueden acudir a la instalación de AHF Panamá, ubicadas en avenida Perú, edificio Business Point, Ciudad de Panamá, donde se efectúan pruebas de VIH rápidas y GRATUITAS, con la debida pre y post consejería, de forma segura y gratuita, y toda la información suministrada por la persona es manejada de forma confidencial. Haz clic aquí y agenda tu cita, el servicio es totalmente gratuito.