El llamado chemsex es una práctica que ha ido creciendo en popularidad en los últimos años, principalmente entre hombres gays y otros hombres que tienen sexo con hombres (HSH). Se trata de reuniones privadas donde los varones usan drogas recreativas y mantienen relaciones sexuales, y son sesiones que pueden durar horas o días debido al uso de las sustancias.
Estas prácticas están bajo la mirada de las estrategias de prevención del VIH, pues es bien conocido que el consumo de drogas contribuye a relajar las medidas preventivas como el uso del condón.
Es por esto que investigadores de cuatro países de Europa, a saber, Reino Unido, España, Grecia e Italia, encuestaron a más de mil 500 hombres con VIH que asistían a servicios de atención por esta infección y que acostumbraban a practicar el chemsex.
Impacto en el bienestar
Otros estudios han informado que los hombres gays y HSH usan más drogas recreativas que la población general. En el contexto del chemsex, esto no sólo implica el riesgo de adquirir infecciones sexuales por bacterias u otros virus (además del propio VIH) al tener sexo sin condón, sino que también existe la posibilidad de que las drogas recreativas interactúen negativamente con el tratamiento antirretroviral.
En esta investigación, publicada en la revista especializada HIV Medicine, se encontró que los hombres gays y HSH con VIH que practican chemsex tuvieron tres veces más probabilidades de tener una gran insatisfacción con su vida sexual que sus pares que no lo hacen.
Para abordar el tema, los participantes contestaron un cuestionario de 36 preguntas sobre temas como atención del VIH, prácticas sexuales, consumo de drogas y chemsex.
Uno de cada cuatro participantes dijo haber practicado chemsex en el último año. A la vez, quienes lo practicaron presentaron 70% más probabilidades de haber sido diagnosticados con hepatitis C que quienes no lo habían hecho.
Los hombres que tenían esta práctica también fueron 2.5 veces más propensos a saltarse una o más dosis de su tratamiento antirretroviral.
Según los investigadores, los efectos negativos del chemsex (emergencias médicas, conflictos en el círculo social o el trabajo, relaciones sexuales no consentidas, entre otros) fueron muy similares en los cuatro países estudiados, esto a pesar de que en cada uno el patrón de uso y las drogas preferidas eran muy diferentes. Por esto, subrayan la importancia de promover la salud sexual y brindar atención psicológica a los hombres que lo practican.En AHF Panamá tenemos acompañamiento, pruebas de detección de VIH, información para prevenir el VIH y condones, todo gratuito. Escríbenos por Whatsapp.