Si las salas de urgencias hicieran esfuerzos para detectar el VIH en las personas que llegan a ellas, esto permitiría evitar una de cada tres nuevas infecciones por VIH, lo cual sería una gran contribución a frenar la pandemia que lleva cuatro décadas en el panorama mundial.
En esto concordaron las y los asistentes al Congreso Nacional de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), donde pudieron participar en un simposio titulado “El reto del diagnóstico oculto del VIH en Urgencias”, informó el diario español La Vanguardia.
Un impacto más amplio
De acuerdo con los ponentes especialistas, los servicios de urgencias podrían realizar pruebas de detección del VIH, lo cual beneficiaría no sólo directamente a la persona que acudió al servicio, sino a la comunidad en general, ya que se puede canalizar a tratamiento, el cual, de acuerdo con las guías internacionales, debe empezar tan pronto como sea posible después del diagnóstico.
Comenzar y seguir adecuadamente el tratamiento hace posible que la persona que vive con VIH alcance un nivel indetectable, es decir, una cantidad tan pequeña de virus en la sangre que es imposible de detectar por las pruebas comunes.
Cuando la persona ha mantenido ese estado indetectable durante al menos seis meses, se considera que su infección está adecuadamente controlada y se menciona que está en supresión viral.
El doctor Juan González del Castillo, coordinador del grupo de infecciones de la SEMES, consideró que los servicios de urgencias tienen una oportunidad de diagnosticar y de esta manera lograrían incidir para disminuir las tasas de diagnóstico oculto y de diagnóstico tardío.
Se sabe que, como es el caso de muchas otras enfermedades, mientras más tiempo tarde en detectarse el VIH, más daño habrá podido causar en el organismo y más tiempo habrá pasado en que la persona, ignorando que tiene la infección, habría transmitido el virus.
Llegando a todas las poblaciones
La SEMES arrancó en hospitales de España el programa que llamó “Deja tu huella”, el cual emite una serie de recomendaciones para que las y los médicos soliciten una prueba de detección de VIH “no urgente” a personas que llegan a los servicios de urgencias.
Utilizar esta estrategia permitiría el diagnóstico de personas que, por lo regular, no acuden a otros niveles de servicios médicos, debido principalmente a factores como que son muy jóvenes y están sanos, o a que no cuentan con seguridad social, como es el caso de los inmigrantes cuya situación no está regularizada, las personas sin hogar y aquellos que usan drogas inyectables.
Durante el evento también se enfatizó que otro de los objetivos de la propuesta es disminuir las tasas de diagnóstico tardío, que en España se mantienen cerca del 50% de las personas con VIH.
Un esfuerzo de gran alcance
La realización de pruebas de detección del VIH en las salas de urgencias tiene objetivos ambiciosos, pero alcanzables: cambiar el curso de la epidemia y frenar su expansión. Se ha comprobado que una de las herramientas principales para la respuesta eficaz a la pandemia son las pruebas de detección.
Como apoyo a la estrategia mencionada, los científicos destacan que se debería fomentar la realización de pruebas en todas aquellas personas que tengan factores de riesgo, como son:
- Relaciones sexuales sin condón y/o con múltiples parejas
- Uso de drogas inyectables
- Embarazo
Normalicemos la prueba
Muchas organizaciones gubernamentales y civiles, como AHF Panamá, buscan normalizar la realización de pruebas de detección de VIH tal como se hacen pruebas de niveles de glucosa. Tales pruebas no tienen por qué involucrar un prejuicio moral ni social, y deberían ser puestas al alcance de todas las personas.
Si quieres realizarte una prueba de detección de VIH gratis puedes acercarte a nosotros, localiza nuestras oficinas o escríbenos por Whatsapp.
